Todos tenemos talentos naturales. Sí, todos. Tal vez nunca los has potenciado o tal vez hasta ahora no has descubierto cuáles son, pero puedo asegurarte que los tienes.

Conocer tus talentos es extremadamente importante a la hora de desarrollar tu sello personal, sobre todo si te estás reinventando.

Desempeñarte de acuerdo con tus talentos es un elemento esencial para moverte en tu zona de flow, ese estado único en que disfrutas mientras trabajas y puedes sacar lo mejor de ti.

También lo es para entender qué tipo de personas necesitas en tu equipo para que te complementen. Conocer tus talentos te permitirá identificar actividades que “no van contigo” y que debes delegar a otras personas y así puedas enfocarte al 100% en lo que se te da mejor.

Y no, no me refiero a ningún superpoder, sino a una capacidad que se te da de manera natural, innata. Por ejemplo, puede que se te dé muy bien hacer números, o tal vez se te da muy bien cantar.

“Pero Fabi, ¿qué hago para descubrir mi talento?”

En este video te dejo un #ConsejoExpress con el que aprenderás cómo descubrir tu talento (aunque esté muy, muy oculto).

Como has visto, descubrir tu talento innato no es ninguna ciencia extraña.

El problema es que se trata, más que nada, de un trabajo de introspección, y a muchas personas esto les asusta. Es normal, no es fácil mirar para adentro.

Pero es necesario.

Así que cuando te sientas preparada para descubrir tus talentos innatos, recuerda estas herramientas:

#1: Piensa en qué proyectos te gustó trabajar en el pasado

Y, sobre todo, piensa por qué te gustó trabajar en ellos.

¿Fue porque estabas acompañada de otras personas? ¿Fue porque te resultaba fácil?

Si no se te ocurre ninguna actividad, puedes hacer el ejercicio opuesto: ¿en qué proyectos NO te gustó trabajar y por qué?

#2: Intenta recordar las cosas que te gustaban de chica

Otra técnica que puedes utilizar es recordar las cosas que te gustaban cuando eras pequeña.

Esas actividades que disfrutabas cuando aún no eras consciente de las normas sociales y la presión de la sociedad.

Antes de que te dijeran “de eso no se puede vivir” o “es hora de que madures”.

¿En qué actividades perdías la noción del tiempo? ¿En qué actividades ayudabas siempre a tus amigos?

#3: Inspírate en una lista de talentos

Si no te viene a la mente ningún talento que puedas tener, puedes usar una lista de habilidades y talentos para intentar reconocer cuáles te van mejor.

Aquí te dejo algunos como ejemplo:

• Motivación: siempre empujas a los demás a sacar lo mejor de sí.
• Persistencia: eres una persona muy trabajadora y activa.
• Flexibilidad: no tienes miedo al cambio y te adaptas rápido.
• Organización: siempre logras encontrar el orden dentro del caos.
• Leal: sigues tus convicciones no importa quién se interponga.
• Liderazgo: no te asusta asumir nuevos retos y guiar a otros a través de ellos.
• Espiritualidad: sabes encontrar un sentido en todo lo que se te presenta.
• Creatividad: siempre encuentras una solución a cualquier problema.

Solo tienes que buscar un poco en Internet y encontrarás listas con un número infinito de talentos.

¡No te desesperes ni te marees! Léelos con paciencia y ve si puedes identificar los que mejor se ajustan a tu realidad.

#4: Pregunta a familiares y amigos

¿Qué mejor forma de descubrir tus talentos que preguntándoles a los que te conocen?

Muchas veces los demás ven en nosotros cosas que nosotras mismas no notamos. No tengas miedo de preguntar a los demás qué es lo que más les llama la atención de ti o qué es lo que más les gusta de tu forma de ser.

Un consejo útil aquí es preguntar a personas de diferentes ámbitos de tu vida:

• Familiares.
• Amigos.
• Compañeros de trabajo.
• Pareja.
• Hijos.

Te podrán dar una perspectiva que nunca antes imaginaste.

¿Cuál es tu talento?

Un último tip: identificar tu talento no necesariamente implicará encontrar tu pasión.

Puedes tener un talento que, de buenas a primeras, no te parece apasionante. Por ejemplo, si eres buena con planillas de números.

Pero si conectas este talento con algo que te apasione, como ayudar a las personas a emprender, podrías descubrir que eres buenísima como coach financiera. ¿Quién sabe?

Es la combinación ganadora: una actividad que ames y que se te dé muy bien.

A fin de cuentas, la decisión de lanzarse como independiente normalmente se apoya en el deseo de dedicar tu vida a algo que te haga sentir plena, FELIZ. Es por eso que entender tus talentos es una pieza clave para que tu negocio explote al máximo tu potencial.

No tengas miedo de indagar dentro de ti misma.